Según indican los expertos, todo apunta a que este año sí va a ser un año apasionante para la impresión 3D, una técnica que ya se está utilizando en moda, arte y gastronomía. Precisamente, del sector culinario, y relacionado con la salud, proviene una de las últimas innovaciones que nos ha llamado enormemente la atención. Nuevas iniciativas que contribuirán a fortalecer el comercio minorista en la personalización de los productos para sus clientes y como acciones de fidelización.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Wageningen en Holanda, en colaboración con la cooperativa láctea FrieslandCampina, está analizando la forma de crear productos lácteos utilizando la impresión 3D. En concreto, están tratando de encontrar la forma de fabricar productos acorde con las diferentes necesidades de los consumidores y tratando de minimizar las características negativas de estos alimentos, como por ejemplo los altos niveles de colesterol existentes en algunos quesos.
De esta forma, buscan dar con productos aún más saludables que puedan ser claves en la dieta de una persona. Además, según indican, esta impresión 3D puede no sólo utilizarse para replicar alimentos, también para transformarlos y remodelarlos en un nuevo formato.
Investigando un poco más sobre este uso gastronómico, hemos visto que no es el primer caso. La empresa alemana Biozoon Food Innovations también está utilizando esta técnica para elaborar comida que literalmente se derrita en la boca. En este caso, es un avance destinado a las personas más mayores con problemas para tragar.
La empresa utiliza la gastronomía molecular para crear comida que se puede “imprimir” usando una impresora basada en una extrusora estándar. La comida es sólida y completamente comestible, pero a la hora de comerse se disuelve rápidamente en la boca.
Según parece, la impresión 3D puede jugar un papel importante no sólo en cómo comemos, también en cómo nos sienta después de hacerlo.
Pero las aplicaciones de esta técnica 3D son infinitas y recientemente hemos visto que Nike y Adidas han decidido explorar esta tecnología y ya están experimentando con ella con el objetivo de lograr calzado personalizado.
Consideran que esta tecnología tiene un gran potencial para impulsar sus líneas de calzado y quieren aprovecharla para ofrecer a sus clientes productos 100% personalizados. Sin duda, oportunidades para fortalecer las acciones de marketing del comercio minorista.