Los clientes pueden pagar sus compras a través de cámaras 3D, un proceso que no dura más de 10 segundos.
La calle comercial de Wuma, ciudad de Wenzhou (este), se ha convertido en la primera calle en implantar esta tecnología en el país asiático.
Para ello, las autoridades locales han firmado un acuerdo con Ant Financial, compañía vinculada a Alibaba y propietaria de la plataforma de pago Alipay.
Un total de 20 establecimientos han instalado esta forma de pago en sus comercios, y los clientes podrán realizar el pago de sus compras a través de Dragonfly, un equipo de cámaras 3D conectado directamente con Alipay, un proceso que no dura más de 10 segundos.
Según indican desde Ant Financial, este sistema es capaz de distinguir entre una imagen real y fotografía con una tasa de precisión del 99,99%.
Si establecimientos y clientes están contentos con esta forma de pago, se espera que se incremente el uso de esta técnica de reconocimiento facial en otras áreas de la ciudad.